Por, Liliana Orejuela, PMP
A menudo me he preguntado si jugar ajedrez y ser Project Management Professional (PMP) tiene alguna similitud.
No es una casualidad el hecho que en ambos roles se plantean y desarrollan estrategias y, como es sabido, en ambos se necesita de un continuo aprendizaje basado tanto en la experiencia como en el conocimiento adquirido.
Soy de los convencidos que la gestión de proyectos es la nueva normalidad para las empresas y que el gerenciamiento de proyectos es esencial para el éxito empresarial y organizacional.
Ahora, el PMI (Project Management Institute) es una de las instituciones más reconocidas que fomentan las mejores prácticas de gestión de proyectos y elaboró la guía PMBOK (Project Management Body Knowledge) para ayudar a las organizaciones a obtener mejores resultados.
Agregando a lo anterior, cada empresa es una organización con su propia cultura y filosofía, lo cual lleva a adaptar el PMBOK a sus propias metodologías introduciendo elementos diferenciadores.
Esto nos conduce a que los elementos diferenciadores para ser exitosos deben fundamentarse en la experiencia y conocimiento de sus Project Management Professional, o bien conocidos PMP.
Hay que mencionar, además, que el ajedrecista también requiere de estudios, experiencia y conocimientos. Para mejor entender, vamos a mencionar la apertura Catalana.
La apertura Catalana genera un gran número de trasposiciones, por lo que un jugador con un buen nivel de juego podrá verse muy beneficiado al poder llevar a su oponente en una dirección acorde a sus intereses. En segundo lugar, es una apertura de una gran riqueza estratégica. (https://thezugzwangblog.com/la-apertura-catalana, 2020).
Quisiera insistir en que la dirección estratégica se puede basar en el PMBOK para alcanzar los objetivos planteados en la organización luego de un análisis estratégico, esta es una guía amplia pero es tarea del director de proyecto tomar las herramientas adecuadas que se adapten al proyecto que planea llevar a cabo (PMI, 2017)
La visión del PMP es muy parecida a la que tiene un jugador de ajedrez cuando se enfrenta a una partida. El PMP, quien se ha formado en la dirección de proyectos, cuenta con amplia experiencia profesional en la gestión de proyectos y está comprometido con el cumplimiento del código de conducta profesional del director de proyectos; debe contar con la visión de un estratega para culminar con éxito el proyecto o la empresa al igual que el jugador de ajedrez debe estudiar aperturas y estrategias.
Y esto nos conduce a que ya sentados frente al tablero de ajedrez y sin mover ninguna pieza, el ajedrecista ha analizado su stakeholder y tiene planteada su estrategia. Lo mismo sucede con el PMP, antes de dar inicio al proyecto el PMP ya ha analizado los riesgos, tiempos, alcances, recursos, comunicaciones; en fin, ya tiene estructurada su estrategia.
Ya va a empezar la partida o el proyecto… ¿Ya empiezas a ver las similitudes?
Aún hay más y son más interesantes cuando inicia la partida.
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Liliana A. Orejuela Camacho es PMP, Magister de Administración de Negocios con énfasis en Finanzas y con énfasis en Gerencia Estratégica. International MBA Executive. Especialista en gerenciamiento y dirección de proyectos exitosos de consultoría y construcción de infraestructura, principalmente en obras viales. Líder en equipos multidisciplinarios tanto técnicos como en gestión predial, social y ambiental.
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