Por, Sandra M Mercado, PMP®

“Advertimos que iba a pasar”, “era cuestión de tiempo que llegara un virus con rápida capacidad infecciosa” dicen varios científicos sobre la pandemia actual.

No cabe duda que la salud humana es lo primordial y nuestras decisiones deben estar encaminadas a ello, pero en este artículo quiero es compartir mis pensamientos sobre los negocios personales.

Por más de 12 años siempre he tenido los pies en 2 mundos: el del empleo formal y el del emprendimiento y en cuanto a este segundo hay una frase que me he repetido siempre: mientras hayan seres humanos caminando por las calles, mientras exista la vida humana, habrá negocio. Siempre.

Negocio hay entonces y seguirá habiendo, el reto es saber responder a ese nuevo consumidor que se está gestando en estos momentos en una economía que no habíamos visto antes.

De esta salimos, no tengo ninguna duda. Pero cuando escucho personas preocupadas por sus negocios, considero que uno de los retos más grandes es ser capaz o desarrollar la capacidad de generar las suficientes ideas para poder mantener y porque no hacer crecer nuestros negocios personales en estos momentos. Y para ello considero que una buena base es tener en cuenta:

• Nuevo cliente: Es un nuevo cliente, más cuidadoso, más prevenido. Dispuesto a gastar más en las necesidades básicas y pensar mejor las otras opciones.

• Nuevo target: En estos días veía unos estudios donde decían que los impactos reales en la economía se verían en agosto. Que habrá (sino lo hay ya) una gran posible disminución del empleo y por ende de los gastos. Esto considero obliga a redefinir nuestro target actual por completo: nuevos intereses, nuevas necesidades, nuevas capacidades de pago.

• Nueva economía: Lo on-line tendrá mayor peso que antes por lo que es importante definir, redefinir teniendo en cuenta: rapidez, acceso desde cualquier parte, calidad, diferentes y fáciles opciones de pago, precio justo.

•  Valentía: Tal vez el más importante. Si eres 100% empleado, la invitación es a considerar empezar tu negocio propio (algo que te guste hacer y en lo que seas bueno). Si eres emprendedor, valentía para tomar una respiración profunda y en vez de dejarse empequeñecer por las noticias, tomar el toro por los cuernos y haciendo uso de toooda la experiencia que sólo un emprendimiento deja, con papel en mano y un buen vaso de gaseosa (o licor en algunos casos) generar ideas, arriesgarse a llevar a cabo algunas de ellas e ir dándole forma a tu nueva forma de hacer negocios. No pierde quien fracasa, sino quién no lo intenta.

No es la primera crisis  a la que se enfrenta el mundo y siempre hemos salido. Sea esta la oportunidad para darle a nuestras ideas, negocios un nuevo impulso y de desarrollar en nosotros la capacidad de adaptarnos y responder al cambio de la mejor manera.

Buen viento, buena mar.

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Un abrazo, nos vemos pronto

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